El Museo del Botijo fue fundado en el año 1970 en la ciudad de Villena por el coleccionista Pablo Castelo Villaoz. El museo alberga una amplia y detallada monografía dedicada a botijos provenientes de diferentes partes del mundo, elaborados con una variedad de materiales que abarcan desde la madera hasta la cerámica, exhibiendo una diversidad de formas y estilos. Las diversas salas del museo exhiben más de 1200 ejemplares de estos objetos.
El museo se encuentra ubicado en la casa de su fundador. Construida a principios del siglo XX, la vivienda ha conservado en gran medida su estructura original, destacando especialmente la cocina, que cuenta con las herramientas tradicionales de la época.
La colección del museo incluye una variedad de ejemplares fabricados en diferentes materiales, como metal, madera y barro cocido. No obstante, la mayor diversidad se aprecia en los diseños de los botijos, que presentan formas y motivos antropomórficos, zoomórficos, fitomórficos y arquitectónicos, entre otros.
El museo puede ser visitado mediante previa reserva y concertación de visita.